viernes, 20 de noviembre de 2015

MINI AREPAS REINA PEPIADA

Este mes Desafío en la cocina viene con sabores sudamericanos, Carolina, de Tomillo, laurel y otras cosas de comer, nos ha propuesto hacer arepas. Se trata de una preparación muy típica de Venezuela, Colombia y Panamá, aunque también se hace mucho en las Islas Canarias. La base es la harina de maíz precocida, con la que se hace un pan que luego se cuece al horno, a la parrilla o incluso se fríe. Los rellenos son muy variados, ahí ya manda la creatividad y los gustos de cada uno.Yo he seguido la receta de Mercado calabajío para hacer una de las arepas más representativas de Venezuela, la "Reina pepiada" una expresión que quiere decir "la soberana de las buenas curvas". Se creó en 1955 en honor a la modelo venezolana Susana Dujim que ese año ganó el campeonato de Miss Mundo.


Ingredientes para 12 arepas pequeñas

Para la masa:

1 taza pequeña de harina de maíz blanco precocida
1 taza y media de agua templada
1 pizca de sal
mantequilla para untar la sartén

Relleno:

Pollo asado desmenuzado
1 aguacate
1/4 de cebolla
1 diente de aho
pimienta
1 lima
1 huevo
aceite de girasol
sal

Para hacer la masa, mezclamos bien harina, agua y sal y dejamos reposar 20 minutos.
Con las manos untadas de aceite, cogemos pequeñas porciones de masa y formamos bolitas, las aplastamos ligeramente sobre la mesa dejandoles el grosor aproximado de un dedo. Las ponemos en una plancha o sartén untada con un poco de mantequilla y dejamos que se hagan 5 minutos por cada lado. A continuación las metemos al horno a 180º otros 15 minutos para que terminen de hacerse. Al sacarlas del horno las envolvemos en un paño y dejamos que pierdan un poco de calor.
Mientras tanto, preparamos una mayonesa con un huevo, una pizca de sal, zumo de lima y aceite de girasol. La reservamos
Pelamos el aguacate y lo cortamos en trocitos para luego aplastarlo un poco con un tenedor, para que quedé como una papilla. Lo rociamos con unas gotas de lima y lo mezclamos con el pollo desmenuzado. Añadimos el diente de ajo bien picado, la cebolla rayada y dos cucharadas de mayonesa. Ponemos un poco de pimienta y mezclamos bien. Ya tenemos el relleno listo
Abrimos cada arepa con ayuda de un cuchillo y rellenamos generosamente.
 


¡Buen provecho!
Y ahora, podeis ver las recetas del resto de participantes de este Desafío en la cocina, AQUÍ. El mes que viene, más, con propuesta dulce en pleno mes de diciembre....



domingo, 15 de noviembre de 2015

TARTALETAS DE CHOCOLATE Y CARAMELO SALADO

Si te gusta el chocolate, no puedes dejar de preparar estas tartaletas. La mezcla de sabores es deliciosa.
Hace unos meses probé en Francia una tarta bretona de chocolate y caramelo salado. Me encantó y me quedé con ganas de hacerla en casa. Fue en Roscoff, un encantador pueblecito de la Bretaña Francesa, donde el caramelo salado es el rey de la cocina. Las calles bretonas huelen a mantequilla y a caramelo salado. Y eso unido a sus paisajes y a sus gentes, hacen que el viaje sea inolvidable.

Se trata de una preparación muy sencilla: una masa sablé que cocemos previamente, una ganache de chocolate y el imprescindible caramelo salado.


Masa Sablé (receta de My European Cakes):

250 g de harina de reposteria
125 g de mantequilla fria cortada en dados
50 g de azucar glass
1 huevo

Ponemos en un bol la harina, la mantequilla y el azúcar. Con las manos vamos engrasando la harina, hasta que ya no queden trozos de mantequilla y tengamos una especie de arena fina. Añadimos el huevo batido  y amasamos para ligar la masa, pero amasando únicamente lo justo. No debemos pasarnos de amasado.
Colocamos la masa entre dos papeles de horno y la estiramos con un rodillo dejandola con un grosor de unos 2 mm. Si está demasiado blanda, dejamos que enfríe un poco en la nevera y ya podremos trabajarla  mejor. Con un cortador, cortamos círculos que se adapten a las medidas del molde de tartaleta y los forramos, procurando que no queden bolsas de aire y cortando la masa restante al ras del borde de cada molde.
Vamos a cocerlas en blanco, es decir, sin relleno, así que necesitamos colocar peso dentro de cada molde para que la masa no suba. Lo habitual son unos garbanzos o cualquier otra legumbre que tengáis a mano.
Horneamos a 180º hasta que la masa esté dorada y crujiente
Desmoldamos rápido y dejamos que enfríen.

Caramelo salado (receta de Gastronomiaycia):

160 g de azúcar
 60 g de mantequilla 
2 gramos de flor de sal o sal maldon
115 g de nata a temperatura ambiente

Ponemos el azúcar en un cazo a fuego medio para hacer un caramelo rubio, con cuidado de que no se haga demasiado. Retiramos el cazo y añadimos la mantequilla troceada y la sal, mezclando. Incorporamos la nata poco a poco removiendo con una espátula  y volvemos a poner al fuego, sin dejar de remover, hasta que coga un poco de cuerpo. Retiramos y reservamos. Aunque la textura es líquida, espesará al enfriar.

Ganache de chocolate:

250 ml de nata
175 g de chocolate negro (70%)

Ponemos la nata al fuego, cuando hierva, añadimos el chocolate troceado. Retiramos del fuego y removemos bien con varillas para mezclarlo.

Montaje de las tartaletas:

Ponemos en cada tartaleta una base de caramelo salado, aproximadamente la altura de un dedo. Dejamos reposar en la nevera para que espese más rápido y cree una capa consistente. Ya solo nos queda añadir la ganache encima, hasta casi el borde de la tartaleta. Volvemos a dejar en nevera hasta el día siguiente.
Podemos decorar cada tartaleta con una fresa laminada y unas hojas de menta o simplemente, con unas escamas de sal.



Un postre delicioso para celebrar el cumpleaños de mi amiga y tocaya Patricia, de Las cosas de mi cocina, que celebra los 5 años de su blog. Un placer poder compartir con ella esta receta y todos los días del año. ¡Qué cumplas muchos más, preciosa!
Además está de concurso, así que si áun no conocéis su blog, ya estáis tardando, porque además de disfrutar de uno de los mejores blogs reconocidos en los Premios Bitácoras, podeis ganar un lote de productos de Lékué.
  
                                           Sorteo 5º aniversario patrocinado por Lékué

miércoles, 4 de noviembre de 2015

CANUTILLOS DE CREMA #diadeldulceTS


Llega el día más dulce del año. El día del dulce Typical spanish, toda una tradición con la que queremos reivindicar que en nuestro país tenemos muchísimos dulces y que no hace falta celebrar fiestas extranjeras para hacer unas galletas o unas tartas diferentes. España tiene dulces para cada día del año.
Este año os traigo una receta tan tradicional, que sus medidas no se miden en gramos ni en mililitros, sino en pocillos. Es la receta de canutillos de mi tía Angelina. Una masa suave a la que se le da forma con ayuda de unos palitos de madera, en este caso hechos por mi padre y que se fríe en aceite. El relleno tradicional, es la crema pastelera, aromatizada en este caso con vainilla.
Un bocado delicioso y en mi caso, con sabor a tradición y a familia.


Vamos con los ingredientes, para facilitaros el trabajo, la medida del pocillo equivale a unos 70 gramos.

Para la masa:

1 pocillo de leche
1 pocillo de vino blanco
1 pocillo de aceite de girasol
Harina de reposteria: la necesaria (aproximadamente 280 g)
Una pizca de sal

Para la crema pastelera:

250 ml de leche
2 cucharadas de azúcar
1 cucharada de maizena
1 huevo
1 vaina de vainilla

Comenzamos haciendo la crema. Mezclamos en un bol el azúcar, la maizena, el huevo y un poco de leche. Abrimos la vaina de vainilla longitudinalmente, raspamos el interior con la punta de un cuchillo y añadimos tanto la vaina como la pulpa que hemos extraído a la leche que hemos reservado. La ponemos al fuego y antes de que empieze a hervir, la retiramos y tapamos dejando que infusione unos 10 minutos. Retiramos la vaina y vertemos la leche en el bol en el que hemos mezclado azúcar, maizena y huevo. Mezclamos bien con varillas y volvemos a poner al fuego, sin dejar de remover hasta que espese.
Vertemos en una fuente y tapamos a piel con film. En cuanto haya templado, reservamos en nevera.



Para hacer la masa, mezclamos leche, vino blanco, sal y aceite y vamos añadiendo harina hasta lograr una masa elástica, que no se pegue a las manos.
Estiramos con el rodillo y vamos cortando tiras estrechas que envolvemos en los palitos o moldes. Freímos en aceite caliente y escurrimos sobre un papel de cocina. Cuando estén templados, retiramos los palitos con cuidado de no quemarnos. Así obtenemos el canutillo hueco. Metemos la crema en una manga con boquilla lisa y rellenamos los huecos de los canutillos. Espolvoreamos con azúcar glass y listos para comer...

Estos son los utensilios tradicionales para hacer la receta: pocillo, que equivale a unos 70 gramos y los palitos de madera en los que se envuelve la masa
Y ahora, para no quedarte sin ideas a la hora de hacer un dulce tradicional, no puedes dejar de echarle un vistazo al recopilatorio de esta nueva edición del Día del dulce Typical spanish